Courvoisier Extravagance

Desde su creación en París, Francia, en 1809, Courvoisier ha elaborado a mano meticulosa y apasionadamente coñacs premiados mediante la combinación de dos ingredientes igualmente importantes: técnicas tradicionales y un impulso incansable por innovar. Courvoisier alcanzó la cima de su popularidad durante la Edad de Oro de París, un período de innovación, optimismo y exuberancia creativa (1870-1910). Durante este período, París se convirtió en el centro mundial de la moda, el arte, la música, la comida, la ciencia y la literatura. Courvoisier estaba en el centro de todo: se sirvió en fiestas en toda la ciudad, ganó elogios y medallas (incluida la Exposición Universal de 1889) y estuvo en las mesas de la realeza en toda Europa. Courvoisier era tan popular y bien considerado que se sirvió en la celebración de la inauguración de la Torre Eiffel en 1889, otro símbolo icónico de la Edad de Oro de París. Courvoisier Extravagence continúa esta rica tradición de calidad y celebración.
Este producto se distingue por su delicado sabor afrutado y su magnífica fragancia de notas de naranja y rosa. También es muy mezclable y se puede disfrutar de varias formas, incluso con refrescos y cócteles. La elegante botella y el tubo de presentación cuentan con un impactante diseño laminado de estilo Jarnacaise inspirado en la inmensa e intrincada estructura de acero y vidrio del Grand Palais de París.
La apariencia elegante y el sabor exquisito añaden una gracia notable y un toque dramático a ocasiones especiales como celebraciones y aniversarios.